Cómo lograr la correcta postura al realizar una sentadilla

Para realizar una sentadilla, es fundamental tener una correcta postura para evitar lesiones y obtener los mejores resultados. A continuación, te explicaremos los pasos clave para lograr la postura adecuada:

Primer paso: posiciona tu cuerpo con los pies separados a la altura de los hombros y apunta los dedos ligeramente hacia afuera. Mantén la espalda recta y los hombros hacia atrás. Esto asegurará una correcta distribución de peso en todo tu cuerpo.

Segundo paso: flexiona las rodillas y haz una sentadilla baja, asegurándote de que las rodillas no sobrepasen la línea de los dedos de los pies. Mantén los talones firmes en el suelo todo el tiempo. Esto permitirá una mayor activación en los glúteos y cuádriceps.

Tercer paso: Asegúrate de que la columna vertebral se mantenga en su posición natural, sin forzar la espalda hacia arriba o hacia abajo. Mantén una posición neutral de la cabeza, mirando hacia el frente y mantén la respiración profunda y controlada.

Cuarto paso: Al momento de levantarte de la sentadilla, hazlo de manera controlada, empieza a extender las rodillas y luego la cadera, manteniendo la espalda recta en todo momento. Esta técnica reducirá la carga en la columna vertebral y evitará lesiones.

Recuerda que aunque parezca un ejercicio sencillo, es fundamental realizar la sentadilla con la postura correcta. Si no la haces de forma adecuada, puede haber una sobrecarga en los músculos que te llevan a una lesión. Realiza la sentadilla de forma lenta y controlada y revisa tu postura en todo momento para lograr los mejores resultados y prevenir lesiones.

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¿Cómo se debe realizar correctamente la sentadilla?

La sentadilla es uno de los ejercicios más importantes para trabajar las piernas y glúteos. Sin embargo, muchas personas no lo realizan correctamente, lo que puede provocar daños en la espalda, rodillas y otros músculos. Por eso es importante conocer la técnica adecuada para realizarla y evitar lesiones.

Primero, colóquese de pie con los pies separados a la misma altura de los hombros. Mantenga la espalda recta y los hombros hacia atrás. Luego, doble las rodillas y baje el cuerpo lentamente, manteniendo los talones en el suelo. No permita que las rodillas sobrepasen los dedos de los pies.

Al bajar el cuerpo, no deje que la espalda se curve. Mantenga los músculos del cuerpo tensos y en el centro. No baje demasiado, hasta que los muslos estén paralelos al suelo es suficiente. Para subir, empuje con los talones y use los músculos de las piernas y glúteos.

Recuerde, no intente levantar más peso de lo que puede manejar. Es mejor hacer menos repeticiones, pero con la técnica adecuada, que aumentar la carga y hacerlo mal. Practique con poco peso primero hasta que sienta que domina la técnica adecuada.