Cuidar nuestra alimentación es fundamental, ya que lo que comemos es un factor determinante en nuestra salud y nuestro peso. Sin embargo, esto no significa que tengamos que renunciar a disfrutar de la comida.
Una de las claves para comer sin engordar es controlar las porciones. Si bien es importante que nuestras comidas sean variadas y equilibradas, no podemos excedernos en las cantidades. Una buena forma de hacerlo es utilizar platos más pequeños o compartidos, y evitar comer directamente de la bolsa o del paquete.
Otro truco para cuidar nuestra alimentación es prestar atención a los alimentos que elegimos. Es necesario evitar aquellos que son altos en calorías, azúcares y grasas saturadas, en favor de opciones más saludables como frutas, verduras, carnes magras y productos integrales. Además, es importante leer las etiquetas de los alimentos para conocer su composición nutricional.
La hidratación también es clave para comer sin engordar. A menudo, sentimos hambre cuando en realidad lo que nuestro cuerpo necesita es agua. Por eso, es importante beber suficiente líquido a lo largo del día, preferiblemente agua, para mantenernos hidratados y controlar nuestro apetito.
Por último, a la hora de comer sin engordar, es fundamental prestar atención a nuestras emociones. Muchas veces comemos por aburrimiento, estrés, ansiedad o tristeza, y no porque realmente tengamos hambre. Por eso, es importante buscar alternativas para manejar nuestras emociones y evitar recurrir a la comida como escapatoria.